Así, las marcas de metilación –mecanismo epigenético fundamental en la regulación de la expresión de genes– de ACE2 en el tejido adiposo podrían proporcionar herramientas útiles para identificar a los individuos de riesgo y predecir la progresión de su enfermedad. Además, dichas marcas pueden ser detectadas en una muestra mínimamente invasiva en los leucocitos sanguíneos.
“Analizamos si los cambios epigenéticos en el tejido adiposo podrían contribuir a explicar el aumento de la mortalidad por covid-19 de los sujetos con obesidad, dado que estas modificaciones son dinámicas y reversibles y pueden representar objetivos terapéuticos para la prevención de los trastornos relacionados”, explica Ana B. Crujeiras, científica en el Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela (IDIS).
El nuevo análisis se realizó en el tejido adiposo subcutáneo y visceral y se reflejó en los leucocitos sanguíneos de pacientes con obesidad en comparación con aquellos con peso normal y después de una terapia de pérdida de peso basada en un programa nutricional o quirúrgico.
Buen biomarcador de riesgo
En total, se estudiaron los niveles de metilación de ACE2 en 98 muestras procedentes de pacientes con sobrepeso u obesidad y voluntarios con peso normal. Los primeros siguieron un tratamiento de adelgazamiento basado en una dieta cetogénica muy baja en calorías (VLCKD), una dieta equilibrada baja en calorías o fueron intervenidos quirúrgicamente para inducir pérdida de peso.
“Estos resultados sugieren que la asociación entre obesidad y predisposición a una mayor severidad de covid-19 podría estar mediada por una regulación epigenética del gen ACE2, donde el análisis de mecanismos como la metilación del ADN podrían suponer un buen biomarcador de riesgo y abrir así una vía potencial a nuevas terapias en la medicina personalizada”, concluye Crujeiras.
Agencia SINC